El 5 de octubre de 1988, se registró uno de los hitos más relevantes de la historia de Chile. Se trataba del plebiscito que definía si Augusto Pinochet, quien lideraba la dictadura desde el 11 de septiembre de 1973, seguía al mando del Ejecutivo hasta 1997. Finalmente, la decisión ganadora fue el «No» con un 54,71% de las preferencias, en donde votaron 7.251.933 chilenos, y que marcó el retorno de la democracia que se concretó con las elecciones de 1989 con el triunfo de Patricio Aylwin, quien asumió el 11 de marzo de 1990, poniendo fin a casi 17 años de dictadura militar en Chile.

A 30 años de este hito que cambió el escenario político de Chile, recordamos algunos de los estrenos más destacados de 1988, en un periodo en que lo digital aún no era tendencia y en donde los discos estaban disponibles incluso en cassette. El listado podría incluir canciones estrenadas antes o después de dicho proceso.

MYRIAM HERNÁNDEZ – EL HOMBRE QUE YO AMO

«El hombre que yo amo», compuesto por compuesto por Gogo Muñoz, fue el segundo sencillo del disco homónimo de Myriam Hernández, convirtiéndose rápidamente en un éxito y que le significó alcanzar su primer número 1 en el Hot Latin de la Revista Billboard, una posición que también se replicó en más de 20 países. En 1988, su carrera comenzó a dar sus primeros pasos internacionales, con más de 125.000 copias vendidas en Chile.

SEXUAL DEMOCRACIA – LOS CHICOS BUENOS

En 1988, en Valdivia y liderados por Miguel Barriga, surge la banda de rock-pop «Sexual Democracia», nombre que surge de un espectáculo en la Universidad Austral de Valdivia, como una parodia a la extrema tensión plebiscitaria de fines de los ochenta. Ese mismo año, la agrupación estrena su disco debut «Los Chicos Buenos», autoproducido y con la particularidad, que debido al acotado financiamiento, una parte se grabó en estudio y otra en vivo. El esfuerzo valió la pena, ya que lograron conseguir las 2.000 copias vendidas en cassette. De dicho álbum, se desprende el sencillo del mismo nombre, dedicado a los bomberos.

DE KIRUZA – ALGO ESTÁ PASANDO

En 1987, se estrena en la escena musical De Kiruza, con Mario Rojas y Pedro Foncea como sus fundadores, una banda de fusión pionera en los ritmos afroamericanos como el soul y el hip-hop. Al año siguiente, presentaron su álbum homónimo, registrado de manera autogestionada, incluyó «Algo está pasando», el primer rap grabado profesionalmente en nuestro país, una pieza que desafiaba con algo de gracia a la dictadura de la época, y que contó con la colaboración de Jimmy Fernández, futuro fundador de La Pozze Latina. El homónimo de De Kiruza fue listado en la edición chilena de la Revista Rolling Stones en el puesto número 38 de los «50 mejores discos chilenos de todos los tiempos».

LOS PRISIONEROS – MALDITO SUDACA

Incluido en el álbum «La cultura de la basura» (1987), en el que se incorporan composiciones de Claudio Narea, y el último que el guitarrista grabó en la primera etapa de Los Prisioneros (después vino «Los Prisioneros» en 2003), Maldito Sudaca fue el segundo corte, que hace referencia a la discriminación latinoamericana con sonidos que se acercaban al ska. El videoclip fue grabado en 1988 bajo la dirección de Cristián Galaz, en distintas locaciones de la capital.

ZALO REYES – MI PRISIONERA

Zalo Reyes, «El Gorrión de Conchalí», fue todo un fenómeno durante la década de los ochenta y de la cultura popular chilena, catalogado como el rey de la balada, con éxitos como «Con una lágrima en la garganta» y «Un ramito de violetas». En 1988, estrenó su noveno disco titulado «De amor», en donde destacaron otros clásicos como «Mi prisionera» y «María Teresa y Danilo».

EL MONTEAGUILINO – CABALLITO DE METAL

Pese a no haber obtenido la Gaviota de Plata en el Festival de Viña 1988, José Sepúlveda interpretó una guaracha campesina, compuesta por Titín Molina, que actualmente es frecuente en el cancionero folclórico y de Fiestas Patrias, con un estribillo pegajoso, y que en ese momento hizo bailar a la Quinta Vergara pero que el jurado consideró que no se cuadraba con las exigencias del género.

Otros estrenos discográficos en Chile de dicho año fueron «Los tres tiempos de América», el 11° álbum de estudio de Quilapayún, que se inspiró en sinfonías compuestas por Luis Advis, con la interpretación vocal de la cantante española Paloma San Basilio. Asimismo, Illapu presentó «Para seguir viviendo», que retrata los últimos años de la dictadura, con la canción que lleva el nombre del disco dedicada al fotógrafo Rodrigo Rojas De Negri, que murió debido a quemaduras recibidas en una protesta contra el régimen.

Ese año también, Luis Jara lanzó su segundo disco «Otra vez de cero»; Álvaro Scaramelli su cuarta entrega «Secretos Desvelados»; La Sonora de Tommy Rey con «El Chiquichá»; Palmenia Pizarro «Palmenia Pizarro Hoy»; La Sonora Palacios con «Canta Orlando Ramírez», entre otros. Tras la gran recepción de su disco debut en 1986, que le valió presentarse en el Festival de Viña del año siguiente, en 1988 la banda Upa! lanzó un segundo titulado «Que nos devuelvan la emoción», en el que participó María José Levine en los teclados y la voz principal de algunos temas. De ese material, destacaron los singles «Ella Llora» y «Sueldos».

BONUS TRACK: DANNY RODRÍGUEZ Y LOS YANACOCHAS – CAMINO A SOCOROMA

En el contexto del Festival de Viña del Mar 1988, la canción ganadora de la competencia folclórica fue «Camino a Socoroma», que posteriormente fue reversionada por Chancho en Piedra en el álbum «Otra cosa es con guitarra». La pieza fue compuesta por Danny Rodríguez, quien también con Los Sayas repitió el triunfo en dicho certamen en 2001 con «Whipala».