Denise Rosenthal y #Viña2020: «He aprendido a no hacerme expectativas. Me quiero dejar sorprender»

Con dos discos editados, «Fiesta» (2013) y «Cambio de Piel» (2017), además precedida por varios sencillos promocionales, Denise Rosenthal llega a Viña 2020 como una de las voces femeninas más destacadas del pop nacional. En 2008, la cantante pisó por primera vez la Quinta Vergara, como parte de Amago, serie juvenil estrenada en 2007 por Canal 13, momento que según ella describió en conferencia de prensa como un antes y un después, y que fue una «de las experiencias más fuertes a lo largo de mi carrera. Era una efervescencia maravillosa. En el festival se me cayó la teja y dije ‘wow!, estoy en uno de los escenarios mas importantes del país».

Ahora 12 años después, comentó que viene con «un espectáculo, a mi modo de ver, de primer nivel. Nos hemos sacrificado y esforzado mucho para buscar un espectáculo que no solo quiera entretener, que no solo sea ver luces, visuales, canto y bailes, sino que efectivamente genere comunicar un contenido real a través de poder ver a trece mujeres trabajando en el escenario, con visuales que proponen ciertas posiciones. Me parece importante darle espacio y aprovechar la posibilidad que se tiene de habitar espacios populares generando contenidos, marcando la diferencia (…) Estoy tranquila, confiada, y sé que estoy aquí por algo».

El show que mostrará este viernes 28 de febrero, la última jornada del certamen, adelantó que «está redondito y las canciones comunican algo concreto. Mi intención es que todo esté en una sincronía, que no haya nada forzado», además con respecto a la contingencia actual, agregó que «es inevitable que mi show no tenga un contenido social, no quiero aprovecharme de ninguna consigna social o política que representa al pueblo y a las personas. Yo hago música y esa es mi manera de comunicar, profundamente creo que en ese lugar es donde me siento más cómoda, generando contenido, espacios de reflexión. Si bien he construido mi propia opinión al respecto, se hace evidente al escuchar mis canciones y al ver lo que tenemos mi puesta en escena, que también tenemos en el escenario».

Con respecto a los mensajes que pretende entregar en sus canciones, Rosenthal explicó que «desde que tomé la decisión de hacer música, y de hacer música popular, me hice muchas preguntas. Fue como, ¿por qué quiero llegar a tanta gente? ¿De qué me sirve? ¿Por qué quiero? ¿Qué quiero? Porque realmente creo que cuando uno toma una decisión, seguir este camino, lo que siempre digo es que hay que intentar ser lo más honesta y fiel con uno mismo, aunque ese camino cueste. Pero hay que ser súper concreto (…) Lo que yo quería realmente era poder fluir desde mi honestidad, desde mi transparencia, y de verdad contribuir, aportar, hacer algo por la ciudadanía (…) Siento que realmente las palabras y el lenguaje son poder, y que generan realidad (…) Hay que hacer sacrificios, poner en la balanza ciertos costos, es una lucha en equilibrio constante».

Además, agregó que «es muy complejo estar siempre con las exigencias que te impone la industria popular. Es una industria que efectivamente es hostil. Pocas veces se encuentran personas que quieran llegar a la profundidad. Ha sido una búsqueda, linda, emocionante y me llena de orgullo estar en un escenario tan grande compartiendo un mensaje, tratando de hacer un cambio y una diferencia desde adentro».

Finalmente, consultada por sus expectativas a nivel profesional y personal, manifestó que «he aprendido a no hacerme expectativas. Me quiero dejar sorprender», a la vez que la posibilidad de estar en Viña, «es poder cumplir una meta que me había puesto hace mucho tiempo, que era poder conquistar el corazón de los chilenos. No quiero seguir lo se acostumbra a hacer, a que somos un país que no quiere lo nuestro, no valorar lo nuestro, irse para afuera y después volver. Lo que yo quería hacer era poder seguir un camino y efectivamente trascender en mi propio país. Poder vivir aquí, habitar la industria de la música popular, y generar cambios de desde acá, mi país. Viña comprueba que ese desafío se cumplió, es un espacio para poder abrir, ir en búsqueda de nuevas oportunidades, y poder amplificar más aún el mensaje. Solo espero poder disfrutar, sentarme y poder vivir el ahí, y ese momento en particular. Es una batalla ganada ya estar aquí».