Luego de inaugurar el recorrido hacia su próximo disco con la balada «¿Dónde se llora cuando se llora?», Francisca Valenzuela lanza el sencillo «Nada Para Ti», canción cargada de emociones que transporta a los oyentes a través de las complejidades del fin del amor, destacando la importancia del autodescubrimiento y el crecimiento personal. Un estreno en el que se la escucha junto a la artista mexicana Ximena Sariñana, responsable de añadir una capa adicional de profundidad y autenticidad a la experiencia musical.

«Elegí esta canción como el siguiente sencillo del disco porque es un álbum que es la sobrevivencia de una ruptura; ‘Nada Para Ti’ es clave en ese proceso porque describe el momento cuando decides que lo has dado todo en una relación y ya no quieres o puedes seguir», confiesa la artista respecto al sencillo en el que se mira a sí misma para reconocer estos dolorosos procesos.

En «Nada Para Ti», Francisca Valenzuela explora el momento en el que se da cuenta que una relación ya no funciona y el subsiguiente proceso de dejar ir. Las letras conmovedoras y las melodías cautivadoras reflejan el dolor, la confusión y la culpa que a menudo se experimentan durante este proceso. La honestidad cruda de Valenzuela brilla mientras navega por las complejidades de elegirse a uno mismo mientras lucha con la pérdida de una conexión significativa.

Respecto a la colaboración con Ximena Sariñana, Valenzuela expresa su emoción y admiración, afirmando que «la invité a participar en la canción porque es una amiga muy cercana que ha estado presente para mí durante este proceso personal de separación. Se conectó de inmediato con la letra y aportó un toque maravilloso a la canción con su voz, arreglos vocales y emociones sinceras».

Acercándose al latin alternative, la chilena entrega un single robusto, lleno de instrumentación y con toda la frescura que trae esta nueva era. La guitarra se encuentra con una confesión orgánica cargada de sentimiento.

«Nada Para Ti» llega acompañado por un videoclip dirigido por la propia artista, en el que se la ve junto a Sariñana en una interpretación confesional y honesta. «Un vídeo muy crudo que honra el sentimiento de la canción, que es casi como un duelo y el espacio de contención que se genera con una amiga tras ese quiebre», concluye Francisca.

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