Luego de que Álvaro Scaramelli renunciara a su cargo de presidente de la Sociedad Chilena de Derechos de Autor, SCD, tras el revuelo que generó la filtración de sus ingresos en el último año y medio, y que ascendían a los 130 millones de pesos por derechos, lo que según él justificó se debió a composiciones que realizó para la televisión.

Sin embargo, la cifra generó cuestionamientos en la opinión pública y en algunos socios, ante lo cual se fijó una auditoria externa y una comisión revisora de cuentas para esclarecer el origen de estos dineros. Independiente del resultado, el ganador del Festival de Viña del Mar decidió dar un paso al costado.

A cuatro días de este anuncio, y en una reunión que se extendió por más de cinco horas, el consejo directivo de la SCD escogió por unanimidad a su nueva directiva para el periodo 2017-2019. La presidencia recayó en el director musical de Inti Illimani Histórico, Horacio Salinas, con una destacada trayectoria que le valió el año pasado ser reconocido con el Sello de Excelencia al Folclor que entrega el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. El primer vicepresidente será el pianista Valentín Trujillo, mientras que el líder de Sinergia, Rodrigo Osorio «Don Rorro» asumirá como segundo vicepresidente. En tanto, en el puesto de secretario general estará René Calderón.

De acuerdo a los estatutos internos, los nuevos consejeros deberán asumir dentro de los 60 días siguientes a la elección, celebrada en mayo, y a una semana de vencer este plazo, se constituyó por primera vez, quedando integrado además por Magdalena Matthey, Mario Rojas, Álvaro Scaramelli, Alejandro Guarello, Andrés Pérez M. y Héctor “Titín” Molina. La proclamación oficial de la nueva directiva será a fines de este mes en una asamblea ordinaria de socios, donde además se darán a conocer los resultados de la investigación por los pagos del compositor de «Soy tal cual soy».

«Este nuevo Consejo Directivo ha establecido el compromiso de redoblar sus esfuerzos para cumplir con sus importantes tareas en materias como recaudación y distribución de derechos, beneficios para sus socios y la difusión de la música chilena», explicó la SCD.