En su tercera entrega previa a su primer largaduración, Kurmi experimenta en profundidad con nuevos géneros. Así cruza el pop, con el R&B y el reggaetón en una dupla de composiciones que estimula. «Hija de Saturno» se titula su nuevo trabajo doble.

«Saturno es el planeta regente de Capricornio, es el dios del tiempo y es quién enseña sobre la paciencia y que las cosas no son siempre cuando tú quieres, sino que tienes que esforzarte. Se asocia mucho también a personas más o menos lentas para moverse en todos los aspectos de la vida. Nunca me voy a olvidar que una de las primeras veces que leí sobre el signo Capricornio decía: ‘Capricornio es la tortuga del cuento La Tortuga y la Liebre’. Es el símbolo de la persona que gana pero gana lento. Gana lento y no tiene el ímpetu de la liebre, no tiene las oportunidades, ni el físico, ni nada de lo que tiene la liebre, pero va a llegar a la meta. A su tiempo pero va a llegar igual», así explica Kurmi al referirse al nombre de su más reciente estreno.

A modo de apertura, «Ni quería salir», es un retrato del hastío, aburrimiento y resignación frente al encierro y las problemáticas actuales a nivel global. En esta canción se suma la colaboración con Vieralonso, artista que le entrega una identidad particular al tema con rimas llenas de cuestionamiento. Una canción que repasa sentimientos comunes de los últimos meses de cuarentena, con un enfoque que desafía a lo establecido pero a la vez acepta lo que ya no ocurrirá.

Este doble lanzamiento lo completa «Tímida», con la cual la cantante se muestra frente a la sensualidad y la atracción que generan las historias de amor que se crean en la mente. Bajo las mismas claves rítmicas, aborda el sentimiento frente a la expectativa de un encuentro amoroso que podría ser más imaginario que real. En este single, Kurmi confiesa a la vez que provoca, contando sus experiencias y deseos.

«Al plantearse como reggaetón no está siendo nada tímido, pero también todo lo que pasa en esa canción ocurre en el campo de la imaginación, con la esperanza de que suceda algo que esa otra persona va a tener que mover porque yo soy muy tímida. Esa es la última gran gota de machismo que me queda. Que un otro tenga que tomar la iniciativa», explica la compositora.