En 1947, la escritora nacional Ester Huneeus Salas de Claro, quien escribía bajo el seudónimo de Marcela Paz, publicó por primera vez «Papelucho», una novela que narra el mundo desde el punto de vista de un travieso niño de ocho años, a través de sus andazas y que se caracterizaba por su ingenio e imaginación.

La colección actualmente considera doce números, siendo el último de ellos «¿Soy dix leso?» (1974), y muchos de ellos forman parte del plan escolar de lectura obligatoria. Sin embargo, a 70 años del primer libro, la Editorial SM estrena dos nuevos cuentos de «Papelucho», titulados «Adiós Planeta» y «Romelio y el castillo», que serán lanzados este sábado 4 de noviembre, a las 12 horas, en el marco de la 37° Feria Internacional del Libro de Santiago. En la ocasión habrá actividades para los niños, experiencias de especialistas, cuentacuentos, torta de cumpleaños y familiares de la autora.

Según explicó a agendachilena.cl, el gerente de publicaciones generales de Ediciones SM, Sergio Tanhnuz Peña, estos textos «fueron escritos por Marcela Paz a fines de los años setenta, que quedaron guardados entre los papeles que conservó la familia, y que hoy se deciden a publicar», y que a su juicio, se erigen como «lo mejor que se ha escrito» de la colección, que ahora conforman 14 libros (Más información en el vídeo).

Por otro lado, El Mercurio, consignó que estos papeles fueron encontrados por una de sus hijas, Paula Claro, quien era partidaria de publicarlos; sin embargo, en un principio, a la mayoría de sus hermanos no les gustaba la idea, hasta que un informe del especialista Manuel Peña Muñoz los terminó por convencer. Los textos ya se encuentran a la venta en el stand de Ediciones SM en FILSA 2017.

Cabe consignar que los nombres originales de aquellos libros fueron reemplazados por los herederos. «Adiós Planeta» había sido escrito como «Papelucho Periodista», donde el protagonista atendía a la inquietudes como la carrera espacial de la época; mientras que «Romelio y el castillo» se titulaba «Papelucho Doctor», con referencias al Festival de la OTI, cantantes de aquel tiempo y el toque de queda durante la dictura militar.