Por: Miguel Yáñez Hernández (@miguelayh) – agendachilena.cl

La experiencia de Ricardo Meruane en Viña 2011 fue bastante ingrata. A pesar de que aguantó algunos minutos en el escenario, tuvo que abandonar tempranamente el escenario debido a las fuertes pifias que recibió por parte del público. Un «gracias, no se molesten» fue lo único que atinó a responder en medio de la frustración. Sin embargo, esa frase marcó un antes y un después para el humorista nacional, ya que fue el protagonista de un docureality (emitido en Vía X) con el mismo nombre.

Se emitieron 200 capítulos y admite que fue el mejor entrenamiento que pudo tener para reponerse del fracaso. El reírse de sí mismo le permitió conectarse y exponerse ante con la gente (asistió a varias manifestaciones sociales), además de retornar a los eventos.

A cinco años del hito, el artista chileno señala que viene con una rutina que lo traslada al origen de su trayectoria de 35 años. «Lo de 2011 fue algo efectista y esquizofrénico. Pero ahora volveré a lo mío, un humor algo más punzante, reflexivo, literal y puntúo… Profundizaré más sobre algunos temas y no me quedaré en frases clichés», precisó.

«He probado la rutina con todo tipo de público, estoy con un buen equipo. La estamos poniendo más pegadora, sintetizándola al máximo y basándonos en actuaciones anteriores que no sean redundante. Haremos un bloque bastante contundente», agregó.

Una tendencia en el humor actual ha sido hacer alusión al hijo de la presidenta Michelle Bachelet por el Caso Caval, lo que es bien recibido por el público. Al respecto, Meruane confirmó que se sumará a ello, pero con «más sutileza, sin darle tanto por el suelo, le daremos una vuelta de tuerca».

Además, anunció que su libreto no tendrá tantos cambios y que hará un escáner del Chile actual, no solo de la contingencia política. «Espero que la gente vaya con la disposición de escucharme, que no sintonicemos y conectemos», sugirió.

Para finalizar, adelantó sorpresas para su presentación de este escenario, donde compartirá con jornada con fans del reggaeton Don Omar, Wisin y la electrónica de Javiera Mena, panorama que no ve adverso haciendo un llamado a no subestimar el público. «Proyectaremos imágenes sorpresivas sobre la corrupción y reviviré el chiste de un cantante en este mismo escenario hace tres años sobre este mismo tema», anunció.