Edo Caroe fue el encargado de abrir la segunda noche del Festival del Huaso de Olmué 2018. Con una rutina de humor y magia hizo reír, y también participar a El Patagual, logrando ser peak de sintonía en lo que va del certamen, con 21 puntos y un promedio de 17,7.

El comediante inició algo nervioso su presentación, para luego afirmarse y triunfar en una noche en que la música argentina de Los Enanitos Verdes y La Cumbia, además del humor nacional, eran los protagonistas. Caroe ofreció un libreto no tan ácido como se ha caracterizado, sino que viró hacia un tono muchos más personal, bromeando sobre las diferencias generacionales y sacando a colación a su hermano y padre con historias cotidianas. Hasta se dio el lujo de ironizar constantemente con el bajo rating y la crisis económica en la que ha sucumbido TVN en el último tiempo.

Foto: TVN

Pero también hubo espacio para la magia, en donde la participación del público fue clave. Para ello, solicitó una cámara del canal para bromear con algunas tomas y finalmente, seleccionar a una persona de la platea para asistirlo en la función. La expectación se tomó en El Patagual cuando dio la orden al público de lanzar las pelotas de plástico que se le entregó a los asistentes a la entrada, y que el joven elegido debía capturarlas en una bolsa. La sorpresa fue total, cuando reveló un mensaje que estaba dentro de una caja en la que vaticinaba el número exacto de balones recolectados: 58, y así fue. Como broche de oro, cerró encerrando a una asistente en una caja, cortando esta última y saliendo intacta.

RODRIGO GONZÁLEZ NO CONVENCIÓ AL PÚBLICO

Tras su aplaudido triunfo en Viña 2016, Rodrigo González no repitió tal en El Patagual y logró una tibia rutina, que a ratos sacó tímidas risas, pero en que la mayoría de los casi treinta minutos que estuvo en el escenario, el público se mantuvo en completo silencio y escuchándolo con respeto, aunque se escucharon algunas pifias. No hubo ni se le solicitó bis.

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En su rutina, que promedió 10,6 puntos, nuevamente bromeo con su apariencia, contó anécdotas sobre el extinto disket, presentó láminas con su cara montada en escenas de series como «Mea culpa» e «Infieles», habló de algunos futbolistas chilenos como Iván Zamorano y Alexis Sánchez, y dio se dio un espacio para hablar sobre sus vivencias, reflexiones, e incluso hizo un llamado al público a abrazarse, porque «es gratis».