¿Quién no ha padecido de penas de amor? Este es uno de los tópicos principales en los éxitos musicales, pues causan sentimiento de representación en los escuchas. Particularmente, la banda chilena, El Último Viaje, a lo largo de su trayectoria, han logrado plasmar el erotismo y pasión de algunas relaciones, en ocasiones temáticas sociales y principalmente la desilusión de corazones rotos.

Relacionado a esto último, estrenan «Whiskey», una pieza altamente rítmica que evoca ganas de bailar, pero a la vez, esparce aromas de nostalgia que impulsan nudos en la garganta. Además, el sencillo trae un videoclip, que va de la mano con el estilo inspirado en las décadas de los 70s y 80s, cuyas influencias agregan un tinte especial a la melodía. Eso sí, sin perder la esencia que caracteriza a EUV.

«Este single fue grabado en nuestro propio estudio, llamado Estudio Infinito, lo que nos permitió tener esa libertad de encontrar los timbres que quisiéramos», afirma la banda.

La producción fílmica es muy ad-hoc al rock & pop predominante en «Whiskey», puesto que, las luces de colores juegan un rol fundamental, centrándose en la era disco, donde los funky bailables causaban furor. A su vez, esta luminosidad tan característica permite a cada uno de los integrantes demostrar sus emociones, sin la necesidad de expresarlos textualmente y con la interpretación que cada persona que escuche y observe decida darle, tanto a la canción, como al videoclip.